Lifting facial

El lifting facial y de cuello es un procedimiento que permite conseguir un aspecto rejuvenecido y reducir con ello las arrugas mediante el retensado de las estructuras que dan soporte a la cara y al cuello. Los pacientes ideales para someterse a un lifting facial y cervical son aquellas mujeres u hombres cuya cara y/o cuello comienzan a «caerse», pero cuya piel conserva todavía cierta elasticidad. La mayoría de los pacientes suelen tener entre 40 y 65 años. 

Un lifting puede hacer que una persona parezca más joven y que aumente la confianza en sí misma, pero no le proporcionará un aspecto completamente distinto. 

Para lograr un resultado óptimo, puede ser aconsejable incluir otros procedimientos en la intervención, como rellenos de grasa propia o una blefaroplastia (cirugía de los párpados). 

Las cicatrices habitualmente son casi imperceptibles, ocultas en la línea de implantación del cabello o detrás de la oreja. 

En nuestra Unidad de Cirugía Plástica y Estética en León buscamos siempre resultados naturales huyendo de los estigmas que aparecen en las sobrecorrecciones, como son la aparición de cicatrices anchas en zonas visibles y estiramientos excesivos que deforman la expresión. Al día siguiente de la operación el paciente podrá irse a su domicilio sin vendajes y en los días posteriores le volveremos a ver realizar las revisiones e iniciar el tratamiento con fisioterapia. Al cabo de unos días se podrá incorporar a su vida laboral con total normalidad.